Me presento…

En el camino de la vida, el Alma busca la manera de contactar contigo para guiarte, para apoyar tu despertar a la vida que mereces, una hermosa vida que siempre ha estado ahí esperando por ti.

He recibido el nombre de Amarís por parte de mis Maestros espirituales con quienes contacto a través de capacidades intuitivas. Significa promesa de Dios en hebreo. Esa promesa es que siempre somos amados, amadas, incondicionalmente por la Divinidad, y al reconocerlo aceptamos todo lo que por Derecho Divino nos pertenece: abundancia, gozo, felicidad.

En mi proceso personal, he recuperado el contacto con mi Alma, conozco su lenguaje, puedo leer sus mensajes ocultos en los padecimientos del cuerpo, los sucesos de la vida. A través de mis capacidades psíquicas de videncia y clariaudencia, puedo mirar y escuchar lo que tu Alma desea que sepas para resolver, liberar, reconciliar, y mas importante aún, reconectar con ella.